sábado, 26 de septiembre de 2009

Preguntas cagonas

Hay preguntas que contestarías sin problema alguno si te las planteara un amigo, sin embargo, si es tu flaca quien te las hace, se convierten en preguntas cagona, yo llamo preguntas cagona a esas preguntitas que parecen inocentes y que tu flaca te hace para que te sientas culpable, aunque no hayas hecho nada malo, por ejemplo, te has ido a comer con la gente de la chamba y cuando regresas, ella está esperando en la cama, preparada con su pregunta cagona, ¿Qué tal la has pasado?, mucho cuidado con lo que le contestas, porque si le dices, “Muy bien, me he vacilado de puta madre con María...no, no, digo con María…no, con Mariano de administración, ya la cagaste, tu flaca se dará la vuelta y pondrá su culo de barrerá entre los dos, tampoco puedes decirle que la has pasado mas o menos, porque te dirá, “Entonces ¿Para qué vas?, todos los años dices lo mismo y todos lo años vas, y pondrá su culo entre los dos, puta, si quieres tener su culo a favor, sólo hay una respuesta posible, ¡Hasta las huevas, la he pasado muy mal!.En las relaciones de pareja hay que estar siempre mosca, porque cuando menos lo esperas, te lanzan el anzuelo a ver si picas, ¿Gordo, te gustó el vestido que llevaba Camila el jueves?, en este caso sólo hay una respuesta posible, ¿Cómo era? No me fijé..., porque, como si te ha gustado o incluso si no te ha gustado, la siguiente pregunta es, ¿Ah sí? ¿Y cómo iba vestida yo?, es que hay una ley inquebrantable con respecto a sus amigas, nunca le digas a tu flaca que su amiga esta rica, por mucho que insista, si te pregunta, “Mi amiga Sara está guapa, ¿verdad?”, ¡Danger! ¡Peligro! ¡Calavera con dos palitos!, ¿Tu amiga Sara?, Estas loca?, perece mi trola cuando me levanto, “Gordo pero ahora que ha adelgazado está muy bien”, ¿Que ha adelgazado?, “La coca seguro será”, puta, ¡Nunca lo admitas!, diga lo que diga, tú no caigas, “Gordo pero la han elegido Miss Mundo”, “¡¡Se habrá culeado a los jueces pues!!”Hay una pregunta cagona a la que yo le tengo pánico, “Gordo, ¿Tu crees que estoy más gorda?, en este caso es importantísimo la reacción rápida, no dejes pasar ni medio segundo antes de contestar, ¡No! ¡No estás gorda!, no se te ocurra dudar lo más mínimo, porque como le digas, “Pueeees, no sé... No”, la cagaste, ella saltará, ¿Cómo que no lo sabes? ¿Es que no se ve? ¡Como yo si veo que tú estás más gordo! ¡Te ha salido una papada que pareces pelicano, pareces la mama de Pelican
De todas formas, no te hagas muchas ilusiones porque tengo que decir que hay algunas preguntas cagonas en las que contestes lo que contestes te joderas, yo creo que antes de hacerte una de ellas te deberían leer tus derechos, porque cualquier cosa que digas será utilizada en tu contra, por ejemplo, si durante una limpieza, ella dice, ¡Huy!, gordo, aquí hay una foto de tu ex. ¿Qué hago con ella?, estás cagado, si le dices rómpela, te dirá ¿Qué pasa, que todavía te afecta cuando la ves?, si le dices, no la rompas, cagado, “Ah, ¿no?, ¿Qué aun la quieres?, ¿Qué pasa, te vas a hacer un póster?, pues en esta foto está horrible, ella nunca ha sido bonita, aquí tiene una cara de puta”, ya te cagaste, no hay escapatoria posible. Hay que estar siempre mosca, ya que puede salirte con una pregunta cagona cuando menos te lo esperes, “Gordo, me han dicho mis papás que este año quieren venir a casa a pasar la navidad con nosotros, ¿Qué les digo?, ¿Que sí o que no?, si eres sincero y le contestas,” Puta chola no me agrada la idea mucho que digamos, para qué te voy a engañar... “, “Claro, qué fácil, cómo se nota que no son tus padres, si fueran tus padres ya estarías saltando como huevon ¿no?”, pero si le dices, “Muy bien, diles que vengan”, “Claro, qué fácil, como tú no haces ni mierda, que venga toda la familia ¿No?, total la que limpia y cocina como cojuda soy yo”, estas cagado. Algunas preguntas cagonas se pueden convertir en una auténtica pesadilla, cuando estás tan tranquilo, ella aprovecha y te dice, ¿Me quieres? “Pues claro”, ¿Pero goyito, me quieres como antes?, “Te quiero más negrita”, “Ósea, ¿Que no me quieres como antes, Que no podías vivir sin mí?, “Si”, ¿Sí, qué?, “Que te quiero”, ¿Pero me quieres como antes?, “Te quiero más”, “Ósea, que no me quieres como antes”, ¡¡Por la puta madre!!, hasta dan ganas de separarse, con tal de acabar la conversación!.Pero sin duda la pregunta que más odio de todas es ¿En qué piensas?, “En nada”, “Ay goyito, en algo estarás pensando”, “Pues no, no estoy pensando en nada”, “Esta bien, si no quieres decírmelo no me lo digas”, “No es que no quiera decírtelo, es que no estaba pensando en nada”, “Nop, aunque sea una tontería, en algo estarás pensando”, ¿Pero por qué ese empeño en que piense? ¡No pienso en nada! ¡Y no quiero que vengan tus viejos! ¡Y estás más gorda que la gran puta! ¡Y tu amiga Camila está para hacerla cagar para adentro y fumarme sus pedos!, ¿Mujeres?, no gracias…de pajero viviré mas años….

Arturo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario