Los años maravillosos

Debo aclarar que esta es una historia ficticia, cualquier parecido a la realidad es pura coincidencia, quiero aclararlo, por que no deseo dañar la susceptibilidad de ninguno de mis lectores, lectores que creen en una verdad, y que pueden sentir que les he ocultado otra.

El Fuchis recuerda con nostalgia su etapa escolar, en especial la final, por que El Fuchis pasó por varios colegios durante su niñez y adolescencia, empezó en el Colegio Juan Pablo I, colegio en el que estudió durante la etapa de Inicial, y Transición, colegio en el cual ahora estudia Andrea su hija, estudiaría después en el Colegio Italiano del Callao cursando solo el Primer Grado de primaria, pasaría al Colegio Particular Luís Negreiros Vega ubicado en las cedes de ENAPU, cerca a la Plaza Grau, en dicho colegio cursaría el Segundo y Tercer Grado de educación, luego fue trasladado al Colegio Particular Maria Goretti ubicado a la vuelta de su casa, colegio que mas que colegio, parecía una casa, donde solo una profesora enseñaba todos los cursos, pero al que El Fuchis recuerda con mucho cariño, en dicho colegio cursaría el Cuarto y Quinto Grado de educación, para después ser trasladado al Colegio Particular Grumete Medina, donde empezaron los problemas de conducta, y donde El Fuchis experimentaría los cambios hormonales de la adolescencia, causándole mil y un problemas a sus padres, pero de eso hablare después, en dicho colegio terminaría la Primaria, y cursaría el Primer, y Segundo Grado de educación secundaria, por problemas de conducta El Fuchis seria trasladado finalmente al Colegio Particular Madre Amable, ubicado en la Av. Colon a unas cuadras de su casa, en donde terminaría la secundaria, y conocería a sus compañeros de promoción, un grupo de jóvenes al que extraña profundamente, con el que compartió sus últimos tres años de colegio, y de los que se despidió con la promesa de volver a ver pronto, promesa que hasta el día de hoy no se cumple.

Una mañana del verano de 1999 la Doña Santana regresaba del mercado con El Fuchis, ella había acordado con Don Antonio matricular al Fuchis en un colegio nacional, por los problemas de conducta que este había presentado en el Colegio Grumete Medina, El Fuchis estaba aterrorizado, “¿Un colegio nacional?”, se preguntaba lleno de miedo, “Papá pero en un colegio nacional, mi conducta empeorara, ¡¡Uy!!, si me vuelvo delincuente, será TU culpa”, ante tanta insistencia del Fuchis, Don Antonio desistió de su decisión, al pasar por la Av. Colon llegando del mercado Doña Santana le dijo al Fuchis, “Hijo mira, ¿Qué tal será ese colegio?”, El Fuchis sabia que el Madre Amable había sido un colegio solo de mujeres y que recién hace unos años había pasado a ser mixto, que era religioso, pero que aun tenia la fama de ser un colegio de mujeres, “¡¡No mama, hay estudia pura mujer!!, que me vas a meter hay” Doña Santana lo miró y le dijo “Nada, nada, vamos a preguntar, además tu no estas en condiciones de elegir ¿No?”, al ingresar vieron a una amable señora de nombre Aída, que los saludó cordialmente y los acompañó a la Dirección, entrevistándose con la señora Edita Champagnat, hija de la señora Eda de Champagnat Directora del Colegio, quien llenó de halagos a Doña Santana y a su hijo, y es que El Fuchis tenia buena talla, “Señora pero mi hijo ha sacado 05 en conducta, buenas calificaciones en las materias, pero 05 en conducta” la señora Edita lo miró, “Mmm…05 en conducta ¿Eh?, bueno será todo un reto este muchachito, señora Santana, usted déjelo en nuestras manos”, le presentaron la curricula escolar, le mostraron las instalaciones, la sala de computo, la de exposiciones, y toda la infraestructura del mismo, convencida, Doña Santana dio la cuota inicial de la matricula, El Fuchis estudiaría en el Madre Amable.

En esa época estaba el problema del Fenómeno del niño y de la niña, hacia un calor muy fuerte en Lima y provincias, llegaba el primer día de clases del Fuchis, por el extremo calor el uniforme del Madre Amable que consistía en un pantalón gris, camisa blanca y una chompa verde con líneas blancas (La cual aun conserva el Fuchis), seria cambiado por un short blanco, un polo blanco y zapatillas blancas, hasta nuevo aviso, El Fuchis se presentó puntual con 15 minutos de anticipación, recuerdo que vestía una bermuda “Bahía”, un polo “Niké” blanco, y unas zapatillas “Fila”, estaba bien peinadito y perfumado, con sus lentes bien limpiaditos, su block y sus lapiceros, al ingresar, conoció a Mónica Morales con quien entabló una breve charla, para luego proceder a caminar por todo el colegio ubicando cada aula, para sentirse familiarizado con el nuevo ambiente, fueron llegando mas alumnos, la mayoría se saludaba entre ellos, se conocían “¿Qué tal tus vacaciones amiga?” se preguntaban “Oye te vi en la playa causa” se decían, El Fuchis estaba perdido, para no dejarse atemorizar se acercó al grupo donde estaba Mónica y se paró al costado de ellas, Mónica les dijo a las demás chicas, “Muchachas, el es El Fuchis, va a estudiar con nosotras” “Que chévere” contestaron, para luego seguir conversando de sus vacaciones “Fuchis, ¿y tu que has hecho en tus vacaciones?”…”Ni mierda”, pensó el Fuchis, había estado castigado, no había ido a fiestas, playa, nada de paseos, encerrado durante los tres meses de vacaciones por desaprobar conducta, “Este…bueno me fui a la playa, viaje a provincias con mis papas, todo lo que han hecho ustedes pero mas bacán” “Wow que chévere Fuchis”, una sonrisa apareció en la cara del Fuchis, sonó un timbre, “¡¡¡A formar!!!” dijo la Miss Edita, todos hacían filas por Grados, El Fuchis era el mas alto siempre al ultimo, Miss Edita tomó la palabra, les dio las indicaciones al alumnado, para luego designar las aulas de cada uno, una vez que les dio las aulas y se presentó dijo, “A rezar”, El Fuchis hizo un gesto de molestia “¿Que?, ¿A rezar dijo?, ¿Esta cojuda?”, y todos comenzaron a recitar el Padre Nuestro, el Ave Maria, el Credo, el Gloria, y toda esa huachafada de los católicos, para terminar diciendo “¿Mater Amabilis?” pregunta a la que todos contestaban “Ora por nobis”, al ingresar al salón el cual estaba pintado de verde claro con la mitad de verde oscuro, piso de madera húmeda, carpetas para dos personas de metal y madera forrada en formica, una araña que no prendía, y decoraciones coloniales en el techo, con ángeles y nubes en alto relieve, que al Fuchis le encantaban, todos nos mirábamos, sonriendo, otros serios, hizo su ingreso Mercedes Casussol, una profesora de mirada ojerosa, cabello corto, tez muy blanca, piel muy lozana, y maquillada con un pequeño exceso de rubor, “Buenos días chicos, mi nombre es Miss Mercedes, y seré su tutora”, Mechita, Miss Meche, que grandes enseñanzas dejaste en este Fuchis, tu facilidad de palabra, tu elocuencia, tu “cancha” en la maestranza, creo que ella fue una de las mejores tutoras que El Fuchis había tenido en su largo recorrido académico, enseñaba Literatura, Historia, Filosofía, y Geografía, cada clase que explicaba se quedaba grabada en las mentes de todos, tenia una especie de química, bueno debo decir que El Fuchis era su “hincha”, ella preguntó los nombres de cada alumno, no se si me falla la memoria pero en ese entonces eran, July, Fiorella, Ingrid, Roció, Paola (Gangliufy), Mónica, Mariela, Evelyn, Daniela, Antoinette, Lizbeth, Cindy, Cynthia (Creboisier) , Isabel (Flores), Jeffrey, Jonathan, Ericsson, Mathews, José, Jhon (Verde), David (Flores) y El Fuchis, se presentaron, y empezaron el año escolar, durante ese año conocerían a las diferentes profesoras que dejarían parte de su conocimiento y su vida con nosotros, recuerdo a la Miss Elizabeth que enseñaba matemáticas, física, y demás números, la Miss Betty que enseñaba ingles, la Miss Martha que nos enseñaba Arte, Educación Cívica, Miss Mirtha que nos enseñaba religión y Obe, Mirtha una segunda madre para El Fuchis cuantos consejos le diste querida Mirtha, cuantos recuerdos, estaba la Miss Rosa de Química, el profesor George de Educación física, que luego suplantaría la Miss Maria, había un profesor de computo, ¿Había?, no lo recuerdo muy bien, se que era alto y que lo despidieron, para que entre…”La Simpson” como la llamábamos, una profesora de piel morena y África Look muy gracioso, a la cual nadie quería, y razones habían, y bueno la Miss Nancy “La Usurpadora”, profesora que entraría en reemplazo de la Miss Mercedes por unos meses, al salir embarazada, y a la que le sacaríamos mas de una cana verde, era joven, tenia pinta de nerd, nunca se le vio con una pareja, y fea no era tenia un rostro agraciado debajo de esos grandes lentes que tenia, Nancy si llegases a leer esto, El Fuchis te ofrece sus mas sinceras disculpas, luego estaba la Miss Edita de contextura muy delgada, fumadora en exceso, y que siempre a la hora de recreo tenia una lectura o una historia que contarnos, ella era hija de la Sra. Eda, la directora del Mater, señora de edad, fumadora en exceso también, tenia un ojo de vidrio, usaba peluca a veces para hacernos reír se la sacaba delante de nosotros causando mas de una carcajada.

Estaban los hermanos Flores, David e Isabel, hermanos pero nada parecidos, David era todo un nerd, no salía a jugar en las tardes ¿Para que? Preguntaba, “Si puedo quedarme estudiando”, sufría de excesiva sudoración en las manos, usaba lentes y siempre tenia la mirada baja, era muy inteligente, todo lo contrario a su hermana Isabel, una chica de piel canela simpática, risueña extremadamente coqueta, pero huecaza, capaz de pensar que fornicar es una tarjeta de crédito, no se llevaba nada bien con El Fuchis, ya que este se burlaba de su hermano mientras que ella lo golpeaba fuertemente a lo que El Fuchis solo se reía, con el tiempo ellos tendrían su historia, pero no hablare de eso, un día Isabel fugó de la casa de David, para escaparse con Niels su enamorado muchos años mayor que ella, David dejó el Madre Amable y de ellos El Fuchis solo supo por unos meses, para perder contacto con ellos hasta el día de hoy, también estaba Jhon Verde, que trabajaba en la casa de la Miss Edita, Jhon era callado, pero le gustaba cantar, el solo nos acompañó un par de semanas ese año, dejó el Mater sin conocer el motivo, El Fuchis y sus compañeros terminaron el tercer grado de secundaria sin muchas novedades, Cynthia Creboisier dejaría el colegio, meses después nos enteraríamos que seria mamá, otra que nos dejaría seria Paola Gangliufi o “Ganglufa” como le decíamos de cariño.

El Fuchis era muy molesto en clases, cada alumno tenia una chapa, estaba July Coronado que era la mas pequeñita del salón, chiquita, diminuta, la molestaba de “chata”, Fiorella Báscones era un ángel tez blanca, cuerpo delgado, muy callada, de hermosa sonrisa, una alumna ejemplar podría decir, muy tranquila, Dios si la vieran ahora es todo un mujeron, esta irreconocible, con ella El Fuchis tenia una forma de comunicarse en clases, hacían papelitos pequeños y se los tiraban de capeta en carpeta, con una nota o un mensaje, era su “Chat” artesanal, en fin, Ingrid Rivera era alta, simpática pero tenia unos ojos grandes y coquetos, “Ojo de uva” le decían, Roció Mendoza, la mas inteligente del salón, de contextura gruesa, no muchos la molestaban, El Fuchis la vio hace poco, esta a punto de graduarse de abogada, a Mónica Morales la molestaba haciendo un ruido con la letra “Ch”, ella se apellida Cherres, “Ch ch ch ch ch Cherres”, estaba Mariela Mendoza a quien le decía “El perro” y “Lows”, por haber presentado ciertas cosas en la cabeza de las que prefiero no hablar, Evelyn Martínez “Chesu”, le decíamos así por que era la palabra que decía cada vez que le preguntaban algo, tenia otra chapa pero por generosidad literaria no la diré, Daniela Machiavello, “La Chichobelo, Cara de plato, Cangrejos”, Danielita era la mas relajada, la risueña, la que nos hacia reír con sus ocurrencias, Antoinette Severino “Doña Pepa” una morena linda, súper buena gente pero con una gran quijada, tenia un timbre de voz muy agudo, estaba enamorada de “Pedro” un ser humano por así decirlo algo mayor que ella y bien feo, Lizbeth Inga “La China”, callada, pero simpática, ella no tenia la culpa de apellidarse “Inga”, ya ustedes se imaginan que otra chapa tendría ¿no?, Cindy Paola Espinoza Cotos, vaya recuerdo tu nombre completo tía, era de contextura gruesa, de baja estatura, manos pequeñitas, algo pedante, tenia las mejores cosas, decía que se iba a todas las fiestas pero nadie la bella en ellas, le decían “Cerdo”, y es que con su comportamiento a veces se hacia odiar, con el tiempo se hizo gran amiga del Fuchis, Jeffrey Calmet “Ron Damon” el jugaba en las ligas de menores del Club Cantolao, era delgado, moreno, muy gracioso, El Fuchis llegó a tener una amistad muy buena con el, Jonathan, era el chacota de la clase, burlón, amiguero, bromista, el no tenia chapa, al contrario el te la ponía, Ericsson Llenque era bajito, tenia un cerquillo súper largo que le tapaba los ojos, “El duende mágico” le decían, Mathews Rojas, “Mateo Pumacahua, el cholo” era de rasgos bien marcados, bajito muy tranquilo, algo tonto socialmente, pero en los estudios muy bueno, José Ganoza Cruz “Julinho” como odiaba que le pongan esa chapa, luego estaría Enrique Navarro a quien llamaríamos “El Churre” por ser del Norte del Perú, recuerdo que al ingresar al Mater El Fuchis veía que a Mathews lo agarraban de punto, El Fuchis un día lo defendió y en agradecimiento Mathews lo invitó a comer un cebiche, pero El Fuchis no aceptó, el pensaba que lo llevaría a una carretilla y al Fuchis no le gustaba comer en esos sitios, dicha invitación se repetiría por varias oportunidades y El Fuchis siempre dijo que no, el día de la graduación Mathews les dijo a los chicos, “Muchachos ¿vamos a comer cebiche?”, todos dijeron que si El Fuchis también aceptó, dándose con la sorpresa que Mathews era hijo de Mateo Rojas, dueño de la Cevichería mas cara e importante del Callao “Mateo” al enterarse de eso El Fuchis se quería romper la cabeza cuantos potajes deliciosos habían estado en sus manos y los había despreciado.

Recuerdo un concurso de coros en los que los compañeros del Fuchis interpretarían la canción “Enamorado de mi país”, El Fuchis tocaría el cajón, el día de la presentación llegó, El Fuchis tenia que empezar con un retoque de cajón para que el coro empiece a entonar la canción, El Fuchis hizo el retoque paro el ritmo…y nada, todos se quedaron callados, la risa contagiante de Ericsson hizo que todos se rieran, El Fuchis se puso rojo no sabia que hacer, la Miss Mercedes se tomó la frente con las manos, miró al Fuchis y le dio la señal para que nuevamente volviese a tocar, esta vez si cantaron, quedamos en tercer lugar, También hubo un concurso de actuación, los que actuarían serian Daniela, Ingrid, Ericsson y El Fuchis, El Fuchis e Ingrid serian esposos, Daniela seria su hija y Ericsson seria el novio de Daniela, la obra fue un mate de risa desde el principio hasta el final, ganaron el concurso, era una obra que hablaba sobre el racismo y la negación de la raza, un sketch que El Fuchis recuerda con mucho cariño por la aceptación que tuvo, hubo un paseo al Parque de Las Leyendas también, casi todo el salón fue, recuerdo que Cindy llevó cervezas y que las tomábamos y botábamos las botellas en una huaca, que un guardia los arrestó y que nos escapamos de el, que El Fuchis le puso tierra a la gorra de Mariella y que al ponérsela se le llenó el cabello de tierra, que fueron al sube y baja que Fiorella subió con El Fuchis este al bajar, bajo con tanta fuerza que Fiorella salio volando como trampolín, mil y un recuerdos que siempre El Fuchis llevara en su corazón, recuerdos que nunca olvidara, memorias que forman parte de su vida y que extraña demasiado, ayer El Fuchis conversaba por Messenger con Antoinette que se encuentra en los Estados Unidos, y con Mónica que es enfermera y les decía que las extrañaba mucho que de haber sabido que después del colegio las cosas serian así, gustoso hubiese repetido de año, con tal de volver a vivir las locuras que vivió con ellas, con ese grupo de jóvenes que una mañana lo saludo, como un desconocido y que luego formarían parte de una hermandad, de una manada, la cual se cuidaría y que querría por igual, El Fuchis recuerda como lloraron cuando el dio el discurso de graduación, y cantaron “No es mas que un hasta luego, no es mas que un breve adiós…”, pero fue mas que eso, cuando será que El Fuchis vuelva a abrazar a sus compañeros, ¿Será los mismo?, ¿Podrán haber cambiado tanto?, Ingrid quien la mejor amiga del Fuchis, ahora es una exuberante Vedette, pero para El Fuchis sigue siendo la chica con cara de niña a quien visitaba los Sábados en las mañanas para ponerse al día en sus cuadernos, y quien le prestaba sus videos de mangas japoneses, y casettes con música del lejano oriente, Fiorella que un día fue el amor platónico del Fuchis, aunque ella crea que era Ingrid, que era un angelito callado risueño, ahora esta hecha toda una mujer súper desinhibida, lograda, mas extrovertida, tal vez El Fuchis anhele encontrarse con su promoción, pero no acepta encontrarse con los seres humanos que ahora son, sino con esos niños con los que un día compartió, niños que ya no son, que pasaron a ser hombres y mujeres con nuevas experiencias, maduros, y es que toda época pasada fue mejor amigos lectores, ustedes tendrán sus propios recuerdos del colegio, sus propias vivencias, ayer miraba las fotos del colegio y de la graduación , saque mi viejo VHS y vi el video de la ceremonia, recordé, reí, suspire y anhele cerrar mis ojos y estar de nuevo con ellos, con mi promoción, con mi gente del Madre Amable….Ora por Nobis, para July, Fiorella, Ingrid, Roció, Paola, Mónica, Mariela, Evelyn, Daniela, Antoinette, Lizbeth, Cindy, Cynthia, Isabel, Jeffrey, Jonathan, Ericsson, Mathews, José, Jhon, David y el loco Luís, un abrazo a la distancia, diciéndoles que se les extraña demasiado, que nunca El Fuchis dejo de hacerlo, y que espera que ustedes no se olviden de ese gordo “conchasumare” que compartió años maravillosos con ustedes, a su salud compañeros, camaradas, amigos, hermanos…A su salud!!.

Arturo.